Del árabe hispánico albúnduqa, y est del clásico بندقه (bunduqah), "perdigón", y originalmente "avellana", del griego ποντικόν (pontikón), "del Ponto", epíteto por el cual se identificaba a aquél fruto (κάρυον ποντικόν, "nuez del Ponto"). El cambio consonántico está probablemente influido por el portugués almôndega
Uso: anticuado, subestándar, subestándar, subestándar, algunas autoridades consideran incorrecto o vulgar su uso, prefiriendo la grafía albóndiga; sin embargo, hasta la xxii edición del drae no se indicaban tales marcas, y cuenta con uso extendido.