Estos prudentísimos varones se precian tanto de eruditos como de honrados, y no tienen un añico de uno ni otro.Francisco de Quevedo. Obras en prosa. Editorial: Terraza, Aliena. 1882.
¡Quién te vería pasarte cuatro meses... seis... un añico entero, ayunando al traspaso, como ayunaste el otro domingo!Emilia Pardo Bazán (condesa de). La prueba. Editorial: Pueyo. 1886.
↑Por motivos estéticos, debe evitarse dejar una letra huérfana a final de línea. Más información.
↑ 2,02,1«añicos» en Diccionario de la lengua española. Editorial: Real Academia Española, Asociación de Academias de la Lengua Española y Espasa. 23.ª ed, Madrid, 2014.