Turbación de la personalidad que se atribuía al efecto de la Luna en los faltos de juicio y en otros enfermos.[1]
Ejemplo:
Decime francamente —le pregunté a Ceferina—, ¿vos no crees que se te va la mano con mi señora? Te ensañás demasiado. —No me ensaño con tu señora. Lo que hay que oír. Acto continuo, Ceferina se encerró en una de esas lunas que le son tan propias.Adolfo Bioy Casares. Dormir al Sol. Página 111. Editorial: Espasa Calpe. 1973. ISBN: 9584209795.
ladrar a la luna o ladrar a la Luna: Manifestar necia y vanamente ira o enojo contra persona o cosa a quien no se puede ofender ni causar daño alguno.[1]
media luna o Media Luna: Figura que presenta la Luna al principiar a crecer y al fin del cuarto menguante.|| Desjarretadera.|| (figurado) Imperio turco.|| (Milicia) Especie de fortificación que se construye delante de las capitales de los baluartes, sin cubrir enteramente sus caras.[1]